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La enseñanza en el cuerpo
Nos encontramos frente al panel dedicado a la enseñanza en el Cuerpo de Infantería de Marina y un expositor de libros utilizados en la formación de los alumnos en las escuelas de la Armada ubicadas en él.
La enseñanza en el Cuerpo de Infantería de Marina cuenta con una larga tradición y ha sido siempre un fiel reflejo de las vicisitudes por las que ha atravesado la Institución.
Desde la creación del Cuerpo, en 1537, hasta la reforma del Intendente General de la Marina don José Patiño y Rosales, que crea el Cuerpo de Batallones de Marina en 1717, la formación se realizaba en las propias unidades. A partir de la reforma, el Cuerpo se nutre de oficiales del Cuerpo General que se forman en la Real Compañía de Guardias Marinas y de oficiales del Ejército de Tierra. En el año 1827, por Real Decreto de Fernando VII, se crea la Brigada Real de Marina mediante la fusión de los Cuerpos de Infantería y de Artillería Real de Marina. A raíz de ello, en 1830, se constituye la Academia de la Brigada Real de Marina, precursora de las Escuelas propias del Cuerpo para la formación de sus cuadros de mando. Se ubicó en el Cuartel de San Carlos.
Con la reforma de Roca de Togores de 1848, los oficiales que ingresaban en el Cuerpo lo hacían procedentes del Colegio Naval Militar, completando su formación en los batallones bajo la figura del “maestro de cadetes”. Este sistema de enseñanza se mantuvo hasta la inauguración de la Academia General Central de Infantería de Marina el 31 de mayo de 1879, fruto de la iniciativa y capacidad de gestión del Mariscal de Campo D. José Montero y Subiela. La creación de la Academia obedeció al intento de unificar la enseñanza, mejorar su calidad y seguir el criterio de mantener un único centro de formación para todos los infantes de marina. Este cometido lo sigue realizando la Escuela de Infantería de Marina General Albacete y Fuster, ubicada actualmente en Cartagena.
En el expositor se pueden contemplar libros de texto en el contexto de su época:
A principios del siglo XIX, a falta de publicaciones propias, el Cuerpo utilizaba publicaciones del Ejército de Tierra y traducciones de publicaciones extranjeras. Delante, a la izquierda, se exponen dos libros de los considerados de interés militar.
Detrás de estos dos libros, aparece el Manual del Cabo de Cañón de 1.881, de utilidad en la Escuela de Artillería y reglamentario para el Cuerpo. Se exponen las páginas dedicadas a un cañón de desembarco.
Con la creación de la Academia General Central proliferaron las traducciones de publicaciones tácticas extranjeras por oficiales de Infantería de Marina. Así mismo, se inicia la publicación de publicaciones propias como la “Escuadra de Obreros”, considerados “los gastadores” actuales, que encabezan los desfiles.
Con la creación del Grupo Especial en 1.957, se comienzan a utilizar y traducir los manuales de los Marines norteamericanos ya que se adoptaron sus medios y sus plantillas orgánicas. Posteriormente, se empezaron a realizar publicaciones reglamentarias de Infantería de Marina, conocidas como RIM. Se expone el manual del Batallón.
También se expone el manual que se utilizaba en la Escuela de Adultos para la alfabetización de los reclutas.
Antes de entrar en el área de exposición se puede apreciar en una hornacina una ménsula de piedra ostionera, material de construcción del edificio y extraída del Monte del Duque.
La enseñanza en el Cuerpo de Infantería de Marina cuenta con una larga tradición y ha sido siempre un fiel reflejo de las vicisitudes por las que ha atravesado la Institución.
Desde la creación del Cuerpo, en 1537, hasta la reforma del Intendente General de la Marina don José Patiño y Rosales, que crea el Cuerpo de Batallones de Marina en 1717, la formación se realizaba en las propias unidades. A partir de la reforma, el Cuerpo se nutre de oficiales del Cuerpo General que se forman en la Real Compañía de Guardias Marinas y de oficiales del Ejército de Tierra. En el año 1827, por Real Decreto de Fernando VII, se crea la Brigada Real de Marina mediante la fusión de los Cuerpos de Infantería y de Artillería Real de Marina. A raíz de ello, en 1830, se constituye la Academia de la Brigada Real de Marina, precursora de las Escuelas propias del Cuerpo para la formación de sus cuadros de mando. Se ubicó en el Cuartel de San Carlos.
Con la reforma de Roca de Togores de 1848, los oficiales que ingresaban en el Cuerpo lo hacían procedentes del Colegio Naval Militar, completando su formación en los batallones bajo la figura del “maestro de cadetes”. Este sistema de enseñanza se mantuvo hasta la inauguración de la Academia General Central de Infantería de Marina el 31 de mayo de 1879, fruto de la iniciativa y capacidad de gestión del Mariscal de Campo D. José Montero y Subiela. La creación de la Academia obedeció al intento de unificar la enseñanza, mejorar su calidad y seguir el criterio de mantener un único centro de formación para todos los infantes de marina. Este cometido lo sigue realizando la Escuela de Infantería de Marina General Albacete y Fuster, ubicada actualmente en Cartagena.
En el expositor se pueden contemplar libros de texto en el contexto de su época:
A principios del siglo XIX, a falta de publicaciones propias, el Cuerpo utilizaba publicaciones del Ejército de Tierra y traducciones de publicaciones extranjeras. Delante, a la izquierda, se exponen dos libros de los considerados de interés militar.
Detrás de estos dos libros, aparece el Manual del Cabo de Cañón de 1.881, de utilidad en la Escuela de Artillería y reglamentario para el Cuerpo. Se exponen las páginas dedicadas a un cañón de desembarco.
Con la creación de la Academia General Central proliferaron las traducciones de publicaciones tácticas extranjeras por oficiales de Infantería de Marina. Así mismo, se inicia la publicación de publicaciones propias como la “Escuadra de Obreros”, considerados “los gastadores” actuales, que encabezan los desfiles.
Con la creación del Grupo Especial en 1.957, se comienzan a utilizar y traducir los manuales de los Marines norteamericanos ya que se adoptaron sus medios y sus plantillas orgánicas. Posteriormente, se empezaron a realizar publicaciones reglamentarias de Infantería de Marina, conocidas como RIM. Se expone el manual del Batallón.
También se expone el manual que se utilizaba en la Escuela de Adultos para la alfabetización de los reclutas.
Antes de entrar en el área de exposición se puede apreciar en una hornacina una ménsula de piedra ostionera, material de construcción del edificio y extraída del Monte del Duque.
